Guía práctica para circular sin sobresaltos cuando el asfalto se anega
Revisa la banda de rodadura y el tipo de neumático
Selecciona llantas con canales anchos y compuesto blando para mejorar el drenaje. Verifica que la profundidad del dibujo sea superior a 3 mm y ajusta la presión según cargas y temperaturas.
Optimiza la visibilidad exterior e interior
- Sustituye plumillas cada seis meses.
- Aplica tratamiento hidrofóbico en parabrisas y espejos.
- Mantén el sistema de aire acondicionado en modo “desempañado” para evitar condensación.
Protege el sistema eléctrico y la electrónica
Revisa sellos de faros, fusibles y tomas de corriente. Aísla conexiones con grasa dieléctrica y confirma que la batería conserve una carga mínima de 12,6 V en reposo.
Renueva la iluminación
Instala focos LED con certificación DOT o halógenos de alto rendimiento. Ajusta el haz para no deslumbrar y limpia las cubiertas para maximizar la refracción en niebla y lluvia intensa.
Inspecciona frenos y suspensiones
Comprueba espesor de pastillas, condición de discos y ausencia de óxido en líneas. Verifica amortiguadores y bujes: una suspensión firme minimiza el aquaplaneo.
Mantén limpios los desagües carroceros
Retira hojas y suciedad de canaletas en cofre, cajuela y quemacocos. Un drenaje obstruido deriva en filtraciones y fallos eléctricos.
Equipa tu auto con un kit de emergencia
Incluye linterna, señalizador LED, cables pasa-corriente, impermeable, botas, manta térmica y un pequeño compresor portátil.
Adapta tu estilo de conducción
Aumenta la distancia de seguimiento a 5 s, reduce la velocidad 20 % respecto a lo habitual y evita maniobras bruscas. Anticipa frenadas y utiliza marchas largas para mayor tracción.
¡Es hora de que cuides a tu auto como se merece!
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¡Conduce seguro esta temporada!